viernes, 15 de agosto de 2008

Elige la vida

Bien, replanteémonos la vida. Basta echar una mirada para observar las cadenas imaginarias que nos rodean a todos, la falsa ilusión de libertad y la propia conciencia manipulada desde que naces, pero... ¿y si no queremos ser libres?.

3 comentarios:

Irianna dijo...

Aun en el caso de que queramos ser libres,lo cual nos llevaría a una extraña paradoja ya que ¿por qué ibamos a querer la libertad? al fin y al cabo ¿qué nos ofrece la libertad? Nada, aparte de preguntas y lo siempre temible desconocido.
Pero dejando eso de lado, incluso si existiera una persona realmente capaz de desear algo más que unas cadenas impuestas ¿podría librarse de ellas? Sinceramente lo creo imposible, forman parte de ti misma de la misma manera que tu propia personalidad, son ellas precisamente las que te atan a lo que eres. O eso creo yo.

Médula dijo...

Las cadenas tienen historia.

Payasofilica dijo...

Yo creo que la única manera que hay de no querer ser libre es habiendo sido libre alguna vez.
Cosa difícil si no se cree en la libertad.

Me ha gustado mucho el texto y tu punto de vista :)