miércoles, 22 de febrero de 2012

Abrazos.

Existe algo terriblemente íntimo en ellos que nos sacude. Yo no me dejaría dar uno fácilmente. Son capaces de sacarnos desde la mayor de las sonrisas hasta el llanto que teníamos llamando a la puerta de nuestros ojos desde hacía meses.

Hay que tener también cuidado con quién los ofrece, los niveles de oxitocina se asociarán a esa persona, ¿y quién es ese alguien para drogarnos e inducirnos a confiar?


1 comentario:

Sean dijo...

Hay abrazos que curan, abrazos con los cuales no podemos vivir sin ellos...hay algo mas lindo que drogarse con un abrazo? I´m a hugh dealer...